Mucha gente me pregunta que por qué tengo tanto vicio con el tejido y mi respuesta es clara: es lo que más me gusta hacer. Cuando disfrutas haciendo algo, todos los sentidos se disparan y tu cerebro libera una sustancia que se llama serotonina, la hormona de la felicidad. Cuando tejo me siento feliz del todo. Soy una persona muy activa, necesito tener siempre algo entre las manos y no miento si digo que el tejido me está ayudando a no caer en un pozo muy profundo. El tejido y todo lo que conlleva. Por eso se lo recomiendo a todo el mundo. Hay muchas razones para empezar a tejer… Para mi, estas son las 5 razones principales por las que te aconsejo que cojas unas agujas y te lances a la aventura tejeril:

1.  TEJER ES UNA AFICIÓN ENTRETENIDA Y SALUDABLE Y LA PUEDES COMPARTIR CON OTROS.

Todavía hay personas que piensan que tejer es cosa de abuelas. Yo siempre digo: las abuelas tejen porque lo hacen desde hace años, es decir, empezaron a tejer cuando eran jóvenes. Cuando la mujer no estaba integrada en el mundo laboral tenía que aprender estas cosas, además de que en los pueblos poco había que hacer, sobretodo durante el invierno. Entonces las mujeres empezamos a trabajar y los roles empezaron poco a poco a cambiar y muchas hijas dejaron de aprender de sus madres. Pero chicas y chicos, no es para nada incompatible trabajar y tejer. Tejer es una afición muy entretenida, muy práctica, muy sana (no haces daño a nadie a menos que hagas una pelea de agujas) y la puedes hacer en grupo mejorando así tus habilidades sociales y conociendo mujeres maravillosas (y algún que otro hombre).

2. TEJER MEJORA LA AUTOESTIMA.

Hay personas que no se atreven a coger las agujas porque les tienen respeto, porque piensan que no van a ser capaces de crear algo con sus manos. Pero yo siempre digo que si no lo intentas, no lo sabes. Y cuando lo consigues te da una satisfacción increíble. Ganas seguridad en ti mismo, mejoras tu autoestima, y ya tienes otra nueva de la que fardar en las reuniones familiares ;).

3. TEJER MEJORA LA MEMORIA Y LA ATENCIÓN.

A los estudios científicos me remito. No os voy a contar el estudio que todos conocéis sobre lo bueno de la terapia de labores y los beneficios del tejido. Yendo un poco más allá, está demostrado que un cerebro sano necesita estar continuamente con un nuevo desafío intelectual. En el caso de las monjas del científico David Snowdon (uno de los mayores investigadores del Alzheimer), demostró que entre las monjas del convento que usó para sus análisis, aquellas que habían interactuado más socialmente, que tenían un espíritu más positivo, que realizaban nuevos proyectos y que tenían estudios más elevados, eran las más independientes en su vejez y las que menos habían desarrollado la enfermedad. Aprender cosas nuevas, ponerse retos, es bueno para el cerebro. Y encima tejer hace que te concentres solo en lo que estás haciendo. No hay mejor excusa para evadirse de los problemas cotidianos.

4. TEJER DESARROLLA LA CREATIVIDAD.

Cuando estás tejiendo, estás creando. De un ovillo de lana puedes crear cosas maravillosas. A mi marido le fascina esto, sobre todo cuando empiezo cualquier trabajo. De no tener nada, aire, a empezar lo que será un chal, una manta, unos calcetines o un jersey. Todo está en tus manos, con paciencia y dedicación puedes hacer lo que quieras. También ayuda la colorterapia. A mi me da muchísima alegría tener ante mis ojos decenas de colores alegres. A veces la vida se torna gris pero con el tejido y la lana es mucho más alegre y creativa. Tejer te ayuda a romper con todo lo establecido y a crear tu propio ocio, por eso me gusta tanto.

5. TEJER TE AYUDA A SER FELIZ.

Hay quien lo llama el nuevo yoga y sé que no es comparable, porque el yoga viene de una cultura milenaria y tiene un trasfondo espiritual muy profundo, pero para mi tejer es mi yoga particular. Con esto quiero decir que tejer me relaja, es mi meditación, hace que me evada de algunos problemas y que no piense en otra cosa nada más que en lo que tengo entre manos. Y esto me hace ser más feliz porque consigo olvidarme de algunas preocupaciones. Pero también es un compendio de todo lo demás: cuando estás entretenida, cuando tu autoestima está a tope, cuando tienes capacidad para concentrarte en lo que haces y cuando estás creando cosas con tus propias manos solo puedes ser la persona más feliz del mundo :).